Miedo ¿ha vuelto franco?

Parece que no, el caso es que gran parte de la población Canaria tiene miedo, alguna es comodidad, pero se oyen campanas pero ojo yo no he sido.

El canario salía a la calle a protestar contras las injusticias años setenta, pero ahora no dice ni mu. Yo no se donde vamos a ir a parar, pero el futuro de muchas familias lo veo muy tenebroso.

La gente se queja mucho, pero “e” yo no me muevo, que no salgo en la foto, yo  lo vivo cada día, y así vamos muy mal, tendremos todos que poner de nuestra parte y no ser tan cómodos y esperar que los demás nos solucionen las cosas.

Por desgracia los que nos van a representar son los mismos, en estas próximas elecciones locales y autonómicas y ya sabemos de que pata cojea cada cual, y ya sabemos que cuando tienes tos y vas a un médico te manda un jarabe y si tienes gripe te manda el mismo jarabe, o  sea que los que van a quedar mas de lo mismo, paro y mas miseria, pues recordemos que los ayuntamientos y demás están en números rojos, y cuando los falsos profetas tenga su puesto el resto ya todos lo vamos a ver.

Es verdad que hay miedo, hay cada alcalde que se las gasta que ni al Al Capone, y si tu no le caes en gracia, lo tienes crudo, hay muchos que llevan tiempo en la política, por  que han sabido jugar sus cartas, pero  se creen dioses y la opinión ciudadana de una minorías no vales, a veces vale mas que te cambies de pueblo y que no esté gobernado por el mismo partido, pues las islas son pequeñas y nos conocemos todos.

Ay gente que no se atreve a presentarse por algún partido, eso es miedo, hay gente que no se atreve de decirle algo algún concejal que vaya contra suya políticamente, eso es miedo, hay gente que no se atreve a dar mítines por algunos pueblos, eso es miedo, y cuando en política el miedo es un factor importante yo no llamaría democracia tiene otro nombre.

También está el que no tiene miedo, pero  no quiere complicarse, de estos hay muchos, y como sacamos a estas islas adelante, sin participación ciudadana en la política, pues no se puede, hay gente muy valiosa, pero no se compromete.